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Ucrania: Los obispos católicos de rito latino piden a las parroquias que atiendan a los más nececitados
La Conferencia de Obispos de la Iglesia Católica en Ucrania pide a los fieles que defiendan la Patria. Y que lo hagan en función de sus «capacidades y responsabilidades», bien en «el ejército», en el «lugar de trabajo», «en hospitales», o brindando primeros auxilios, apoyo material y palabras de consuelo a los demás. El organismo que preside de manera interina el arzobispo Mechyslav Mokshytsky solicita a familias, vecinos y comunidades que se unan en oración, y a los sacerdotes que, después de cada misa, recen el Acto de Consagración de Ucrania al Inmaculado Corazón de María.
«Recemos juntos el Rosario u otras oraciones por la paz, por los gobernantes de nuestro Estado, por nuestro ejército y por todos los que defienden nuestra patria, por los heridos y muertos, así como en recuerdo de los que iniciaron la guerra y fueron cegados por la agresión. Protejamos nuestros corazones del odio y de la ira contra nuestros enemigos», dice un comunicado emitido este jueves 24 de febrero, tras la invasión del país por las tropas rusas.
«La Iglesia es una comunidad», recuerda. «Que las parroquias y los grupos de oración se conviertan en un lugar de unidad y un centro del que fluyan oraciones por la paz y la protección de Dios. No sabemos lo que nos espera en el futuro, pero que la comunidad parroquial no deje al azar a los más vulnerables y necesitados, independientemente de su afiliación religiosa. Dispénsese de cuidados especiales a los ancianos y enfermos».
La Iglesia católica latina en Ucrania es minoritaria con respecto a la de rito bizantino. Su restauración se produjo en 1991, tras la desintegración de la Unión Soviética. Actualmente está estructurada en una archidiócesis (Lviv) y seis diócesis: Kyiv-Zhytomyr, Kamianets-Podilska, Odessa-Simferopol, Lutsk, Mukacheve y Kharkiv-Zaporizhzya.
«La verdad está del lado de Ucrania»
Por su parte, el Consejo de Iglesias y Organizaciones Religiosas de Ucrania ha hecho un llamamiento «a la calma» y «a no entrar en pánico», al tiempo que pide a los fieles que sigan las órdenes de las autoridades estatales y militares. «La verdad está del lado de Ucrania y la comunidad internacional. Creemos que con ayuda de Dios el bien prevalecerá», afirma. El organismo expresa su apoyo a las Fuerzas Armadas y pide a los líderes religiosos y políticos del mundo que «hagan todo lo posible por detener el ataque del agresor».
Fuente: Sistema integrado digital