En una elección que nadie predijo, Javier Milei, de La Libertad Avanza, obtuvo algo más del 30% de los votos, sin competencia interna. Sergio Massa, de la coalición oficialista Unión por la Patria, obtuvo un poco más del 21% y derrotó a su contendiente, Juan Grabois, que sacó cerca del 6%. Y en la interna de la oposición de Juntos por el Cambio, Patricia Bullrich venció con casi el 17% de los votos a Horacio Rodríguez Larreta, que sacó un poco más del 11%.

También lograron suficientes votos como para participar en las generales Juan Schiaretti, de Hacemos por Nuestro País, con casi el 4% de sufragios, y Myriam Bregman, del Frente de Izquierda y de Trabajadores-Unidad, con algo más del 2,5% de respaldo.

Aquí presentamos los perfiles de los tres principales candidatos para las presidenciales de este año: Milei, Bullrich y Massa.

Quien gane la contienda asumirá el Ejecutivo el 10 de diciembre, cuando se cumplan 40 años del regreso de la democracia al país tras la dictadura que gobernó Argentina entre 1976 y 1983.

Javier Milei, La Libertad Avanza

Javier Milei, de la coalición La Libertad Avanza, tiene 52 años, es economista y de los principales candidatos es, además del más joven, el que menos historia tiene dentro del Estado. Su primer cargo público es el de diputado nacional, que ejerce desde 2021, cuando su llegada a la política fue convalidada en las urnas: obtuvo un 17% de los votos para la elección a ese puesto legislativo por la Ciudad de Buenos Aires.

Su discurso se centra justamente en cuestionar lo que denomina «la casta», el ‘establishment’ de la política local, y en insistir en que deben recortarse dramáticamente los gastos del Estado, incluido el empleo público.

Entre sus propuestas se encuentra la de dolarizar la economía y cerrar el banco central. También prevé privatizar empresas públicas, bajar impuestos y llevar adelante una reforma laboral que reduzca costos para los empleadores.

Su enfoque económico es de corte libertario, pero sus propuestas sociales son conservadoras. Por ejemplo, su partido tiene una posición contraria al aborto legal y prevé que la educación sexual integral deje de ser obligatoria en las escuelas. También plantea desregular la tenencia de armas.

En su carrera profesional, Milei pasó por una AFJP (Administradora de Fondos de Jubilaciones y Pensiones; ese tipo de entidades dejó de existir cuando se volvió al sistema único estatal en 2008), un estudio económico y prestó sus servicios en las empresas de Eduardo Eurnekián, una de las personas más ricas de Argentina, con intereses en los sectores de energía, aeropuertos, infraestructura y agroindustria.

Antes de ser diputado, Milei se convirtió en una figura pública por su persistente aparición en programas de televisión de alto rating, en los que expresaba posiciones críticas respecto al manejo de la economía y otros asuntos públicos de manera muy histriónica.

Su candidata a vicepresidenta es la diputada nacional Victoria Villarruel.

Sergio Massa, Unión por la Patria

Sergio Massa es abogado, tiene 51 años, y ejerce como ministro de Economía de la Nación desde agosto de 2022. Antes, fue diputado nacional y presidente de la Cámara Baja.

Está casado con Malena Galmarini desde 2001, con quien tiene dos hijos. Ella tiene también una larga trayectoria en la escena política y es hija del político Fernando Galmarini. La pareja de Massa es actualmente presidenta de Aysa, la empresa pública de provisión de agua potable y gestión de redes cloacales.

Sergio Massa es uno de los tres principales socios de la coalición peronista que llegó al poder en 2019 con el nombre de Frente de Todos, hoy Unión por la Patria, junto con el presidente Alberto Fernández y –la hasta ahora más poderosa de los tres en términos políticos– Cristina Fernández de Kirchner, actual vicepresidenta y exmandataria.

Si Cristina Fernández representa una suerte de izquierda dentro del peronismo, Massa está más cercano al centro. Tiene buenos vínculos con diversos sectores de la política, el empresariado, los sindicatos y en el extranjero.

Massa ostenta, además, una larga carrera en política, que comenzó a fines de la década de los 80 y principios de los 90. En ese entonces se había sumado a las filas de la Unión de Centro Democrático, un partido de corte liberal. Así se acercó a la presidencia de Carlos Menem, un peronista que llevó adelante políticas neoliberales durante esa década, y fue secretario de Desarrollo Social durante su Gobierno.

Hacia el final de la década fue elegido diputado de la provincia de Buenos Aires por el peronismo y tras la crisis de 2001 se sumó al Gobierno de Eduardo Duhalde. Quedó a cargo de la Administración Nacional de la Seguridad Social, que gestiona las jubilaciones del país y siguió en el cargo tras la elección de Néstor Kirchner como presidente en 2003.

En 2007, Massa ganó su primera elección para un cargo ejecutivo: intendente del partido de Tigre, localidad 15 kilómetros al norte de la Ciudad de Buenos Aires. Entre julio de 2008 y julio de 2009, ejerció como jefe de gabinete del Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner, en el que reemplazó al actual presidente Alberto Fernández.

Luego, se distanció del kirchnerismo durante el segundo mandato de Cristina Fernández y en 2013, con su propio partido, el Frente Renovador, se presentó en elecciones a diputados y superó ampliamente al primer candidato del oficialismo. Con ese triunfo bajo el brazo en 2015 compitió en las presidenciales, pero quedó tercero, detrás de Daniel Scioli, el candidato del kirchnerismo, y del ganador de esos comicios, Mauricio Macri.

Tampoco le fue bien en los comicios legislativos de 2017, a los que se postuló como senador. Luego volvió a acercarse a Cristina Fernández y se sumó al Frente de Todos para las elecciones de 2019, que ganó el candidato de esa alianza, Alberto Fernández.

Sus defensores consideran que es pragmático, que puede dialogar con representantes de los sectores más diversos y que asumió el desafío de comandar el Ministerio de Economía en un momento muy complejo y con perspectivas pesimistas.

Pero sus detractores lo señalan como alguien poco confiable, que cambia fácilmente de posiciones y aliados. Una de las dudas que genera su precandidatura es, si eventualmente triunfa, en qué medida podrá amalgamar al peronismo, que llegó a estas votaciones dividido, y que con su último candidato de unidad, Alberto Fernández, llevó sus disputas al día a día del Gobierno, dificultando la gestión.

Unión por la Patria propone, en la vereda opuesta a Milei, fortalecer el Estado. Su eventual gobierno, afirma en su plataforma electoral, debería enfocarse en recuperar el mercado interno y cuidar a los sectores más vulnerables. También llama a construir un amplio acuerdo nacional con otras fuerzas políticas y sectores sociales.

A diferencia de La Libertad Avanza, Unión por la Patria es progresista en lo social y promueve la defensa de los derechos humanos y, por ejemplo, los derechos sexuales, como el aborto legal.

Su candidato a vicepresidente es Agustín Rossi, actual jefe de gabinete de ministros de la Nación.

Patricia Bullrich, Juntos por el Cambio

Patricia Bullrich es politóloga, tiene 67 años, y fue ministra de Seguridad de la Nación durante el Gobierno de Mauricio Macri (2015-2019) y antes diputada nacional.

Fue parte de la coalición de centro La Alianza, con la que llegó a la Presidencia Fernando De la Rúa, quien estaba en el cargo cuando tuvo lugar la crisis de 2001 y abandonó en helicóptero la Casa Rosada.

Hoy, Bullrich milita en el partido Propuesta Republicana (PRO), del expresidente Mauricio Macri y uno de los socios de Juntos por el Cambio, junto con la Unión Cívica Radical-a la que pertenecía De la Rúa-y la Coalición Cívica.

La plataforma electoral de Juntos por el Cambio llama a «reconstruir» el país. Desde lo económico propone un plan de estabilización para frenar la inflación que hoy está por encima del 115% anual.

Como Milei, esta candidata propone bajar el gasto público y los impuestos. Además, asegura que va a unificar rápidamente los diferentes tipos de cambio (diferentes valores que existen en Argentina para el dólar y que generan distorsiones en la economía). Asimismo, propone reducir la regulación estatal sobre el sector privado, con el objetivo de hacer crecer el empleo en esa área.

Bullrich defiende posiciones de derecha. De hecho, es vista como la oferta más hacia la derecha de su coalición, particularmente en materia de seguridad. Sus votantes la consideran una mano firme que pondrá orden y cortará con lo que consideran un gasto desmedido del Estado.

En cierta suerte de solapamiento con Massa, sus críticos dan cuenta de un recorrido político en el que ha pasado por posiciones que parecen irreconciliables. Bullrich comenzó su actividad política en la adolescencia, militando en la Juventud Peronista. Sin embargo, ella niega haber formado parte de la organización guerrillera Montoneros en su juventud, a pesar de que algunas investigaciones periodísticas aseguran que sí.

Su candidato a vicepresidente es Luis Petri, político de la provincia de Mendoza, en el centro occidente del país y exdiputado nacional.

Fuente: France24