Casi tres metros de nieve en la Sierra de Tramuntana, un manto cubriendo varias playas de Mallorca, carreteras cortadas, pueblos sin luz y sin agua, socavones gigantes en las principales vías de Palma o clases suspendidas en la Universidad. La borrasca Juliette se ha cebado con las Islas Baleares, que llevan dos días seguidos soportando unas condiciones extremas, con frío, viento, lluvia y nieve, que han obligado a decretar incluso la alerta roja en buena parte de Mallorca.

La primera protagonista fue la nieve, que ha cubierto con hasta casi tres metros de espesor toda la Serra de Tramuntana, la mayor de la historia desde que hay registros y sólo comparable a la acaecida en 1985. La nevada histórica alcanzó casi todos los municipios de Mallorca y varios de Ibiza. Han caído copos con intensidad en zonas bajas de la comarca del Pla (Sineu, Petra, Pina, Montuïri o Lloret), en Marratxí, en Santa Maria o incluso en municipios costeros como Manacor, Felanitx y Santanyí, donde la arena de la playa se tiñó de blanco en Cala Santanyí, Cala Llombards o Cala Figuera.

El segundo gran protagonista es la lluvia, que cae con intensidad en todas las Islas Baleares, especialmente desde la tarde del pasado lunes. Varios municipios del norte de Mallorca, como Pollença o Artà, acumulan casi 200 litros por metro cuadrado en las últimas 24 horas.

Aemet pronostica que el paisaje invernal se alargue hasta el fin de semana cuando vuelvan a subir las temperaturas

Y para completar una complicadísima situación meteorológica, el viento ha dejado rachas en torno a los 100 kilómetros por hora en puntos del norte mallorquín como el faro de Capdepera o el Port de Pollença.

La principal prioridad de los servicios de emergencias en estos momentos es rescatar a las más de 70 personas que permanecen atrapadas en el Monasterio de Lluc y los refugios próximos. Los servicios de emergencias han tenido que atender unas 300 incidencias. Felanitx con 24 incidentes, Palma con 22 y Manacor con 22 han sido los municipios más afectados por las precipitaciones de lluvia y nieve de las últimas horas a causa de la borrasca Juliette, que hoy por la mañana ha pasado por Menorca como última estación, donde ha dejado 16 incidencias, según el servicio de Emergencias. Destacan casi 50 caídas de árboles, decenas de incidencias y rescates en carreteras y la caída del techo del polideportivo de Capdepera, que ha salido volando.

Asimismo, hay una especial preocupación por la situación de los torrentes, ya que siete de ellos se han desbordado – Sant Miquel, en Campanet; el torrent de Sa Vall, de Manacor; el de Sa Siurana, de Sa Pobla; el torrente de Can Burguès, en Pollença; el de Son Verd, en Binissalem, y del Búger- y otros, como el Gros, de Marratxí, o el de Sant Llorenç, están en serio riesgo.

El Consell de Mallorca mantiene cerrados varios tramos de doce carreteras de las Islas y todas las instituciones de las Islas han pedido que se evite cualquier desplazamiento innecesario. En Palma, la situación del tráfico es caótica como consecuencia de la intensa lluvia, que ha provocado dos enormes socavones en dos de las principales arterias de la ciudad. El más espectacular, de ocho metros de diámetro, ha surgido muy cerca de la Plaza España, en la avenida Comte de Sallent, una de las populares Avenidas de Palma, que rodean todo el casco histórico.

La policía local ha cortado el tráfico en una dirección y en estos momentos sólo puede circular el transporte público. El otro gran socavón ha aparecido en pleno Paseo Marítimo, delante de donde estaba situada la famosa discoteca Pachá. A lo largo de la mañana, apareció otro socavón, delante de El Corte Inglés de Avenidas, aunque de menor tamaño que los otros dos.

Varios municipios han tenido cortes de suministro de luz y agua. Destaca la situación en Valldemossa, que lleva desde el pasado lunes sin luz ni agua y, además, mantiene los accesos a la localidad prácticamente cerrados.

Otro de los sustos que ha dejado la borrasca Juliette se registró en la Universidad de las Islas Baleares (UIB), donde se hundió parte del techo del edificio Anselm Turmeda en plena clase. La UIB ha insistido en que los alumnos no han corrido peligro y que los pasillos estaban cortados al acceso cuando ha ocurrido el incidente. La universidad se planteó impartir hoy las clases a través de internet, pero los problemas de suministro eléctrico en parte de las Islas obligaron finalmente a declarar el día como no lectivo. De este modo, las clases no volverán hasta el jueves, ya que este miércoles se celebra el Día de Baleares.

Precisamente, preocupa que mañana al ser festivo los ciudadanos acudan a la sierra para ver la nieve. El conseller de Movilidad del Consell de Mallorca, Iván Sevillano, ha hecho un llamamiento para que la gente evite estos desplazamientos. «No es el momento de ir a ver la nieve», ha recalcado la consellera de Presidencia del Govern, Mercedes Garrido.

La borrasca Juliette mantiene activo el aviso rojo, de riesgo extremo, por nevadas en la Serra de Tramuntana, según la predicción de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). Este martes también se ha activado la alerta roja por temporal marítimo en el norte de Mallorca. La altura máxima de las olas puede alcanzar los 15 metros. El puerto de Ciutadella, en Menorca, se encuentra cerrado desde este lunes al mediodía, mientras que el de Maó ha reabierto la mañana de este martes, aunque el tráfico marítimo con la isla sigue cerrado.

La cota de nieve estará entre los 200 a 300 metros e irá subiendo hasta los 500 metros, aunque no se descarta que caigan algunos copos al nivel del mar. Las temperaturas siguen siendo frías, con heladas débiles en la sierra de Tramuntana, aunque el intenso viento procedentes del norte, con rachas de hasta 90 kilómetros por hora en Menorca y el norte de Mallorca, bajará la sensación térmica.

Fuente: ABC